martes, 29 de enero de 2008

Mi regalo para ti

¿Duermes?
No, aún no.
Yo tampoco, ¿te llamo?
Vale.
Después. Una canción me ronda desde la madrugada. No lo puedo evitar. Corazón contento de Marisol. Sobre todo después de dormirme gracias a tus susurros. Caricias suaves. Anoche descubrí a otro. Uno distinto. Uno que llora, es débil, frágil y al que quisiera proteger de todo el mal que hay en este o en cualquier mundo de los que pasean por aquí. Abrazarte con mis dedos y sólo decirte cosas bonitas al oído. Así, hasta el final.
No es fácil escuchar algunas palabras que vuelan desde tu boca. A mí también me duele tu dolor. Tus miedos. Y tus lágrimas se convierten en rabia cuando llegan a mi alma dormida.
Pero hoy ha salido el sol y ese es mi regalo para ti.
“Tú eres lo más lindo de mi vida
Aunque yo no te lo diga
Aunque yo no te lo diga
Si tú no estas no tengo yo alegría
Yo te sueño de noche
Yo te extraño de día
Yo quisiera que sepas,
Que nunca quise así
Que mi vida comienza cuando te conocí...”


http://es.youtube.com/watch?v=Bt1OBKMtFV4

lunes, 28 de enero de 2008

Lilas


Revuelto y espeso. Así me siento desde hace unos días. Espero que todo esto pase pronto. Cuanto antes. Parece que nada fluye. Todo avanza a trompicones. Y así es difícil volver a la calma.
Al final hubo una nueva conversación. Eres extraño, le dije. ¿Sí, por qué? Sí, mucho. Ya te llamo la semana que viene; una de nuestras llamadas interruptus... Bueno, ¿mejor eso que el silencio? Tú sabes, pero ya te lo explicaré un día.
Nada fue diferente a diálogos anteriores, pero el aire era distinto. Esta vez le creí y una sonrisa plácida se me dibujó en la cara. Hoy sé que este camino sólo tiene una dirección, su voz.

Pdt. Ayer se fue alguien que paseó por mi infancia con lilas frescas para siempre.

viernes, 25 de enero de 2008

Morena, lo siento pero no te recuerdo

Intranquilidad. Hoy he tenido algo en el estómago, que no me ha dejado en paz.
Tu llamada no ha mejorado las cosas. Me has dejado, como siempre, a medias y cuando me tocaba a mí hablar has tenido que colgar el teléfono. Siempre haces lo mismo... Lo sé, ya debería estar acostumbrado...
También he conocido a Ignacio. Debería haber ocurrido hace unos días, pero estas cosas van despacio. Está bien, creo que todo irá sin problemas.
Ayer me enteré de que el alcohol me afecta demasiado. Una nueva intranquilidad que se suma a las anteriores. Al parecer, sí que estuve en La Floridita y no sólo eso, sino que además estuve con una morena intercambiando pareceres un buen rato.
Morena, si por casualidad lees esto, lo siento pero no te recuerdo.
Y además de todo esto, envueltas en papel de regalo me asaltan otras ideas sueltas:
No es lo mismo necesitar que amar.
¿Sabe usted lo que es el amor?
Dicen por ahí que el amor es una mezcla entre la admiración, respeto, deseo sexual, afecto y compromiso.
Crees que ya no cometerás los errores de la última vez. Pensé que ésta vez todo sería distinto.

http://es.youtube.com/watch?v=KjlxShn2_I4

Pdt. Con tanto lío, mejor una canción diferente...

miércoles, 23 de enero de 2008

En terreno vedado

La vida real no siempre es como uno desea. Mientras unos piensan que este mundo azultokio es triste, la verdad bien puede ser distinta. Hay de todo, como en botica. De lo único que no había, hasta ayer, era autocensura. Así es, no conté toda la verdad. Aunque me hubiera gustado.
El caso es que últimamente los espías están a la que salta y hay cosas y asuntos que no sólo me afectan a mí. Decir toda la verdad hubiera supuesto desvelar la verdadera identidad de alguien que no sabe que esto existe. Con esto supongo que reabro viejas intrigas e investigaciones, pero el tiempo pondrá las cosas en su justo lugar.
Y para rematar, ha fallecido el protagonista de Brokeback Mountain. Ennis del Mar tuvo miedo de decirle al mundo quién era, aunque eso no le impidió ser.
Pues nada, que tal vez esto sí que sea un espacio donde los afligidos y apenados de la vida se sienten como en casa... Aunque trabajaré para que todo sea distinto.

martes, 22 de enero de 2008

Alimento suficiente


Y al día 33 se te ocurrió llamarme.
Como si nos hubiésemos visto hace un rato. Haciéndote el despistado. Eludiendo la verdad, tu silencio. Tu voz ha vuelto a retumbar dentro de mí y esos escasos catorce minutos son, hasta nueva orden, suficiente alimento para mi alma.
Después de hablar contigo ya nada me sirve. Todo lo pensado ayer está caduco porque tú vuelves a estar y yo sigo con esas ganas tontas de contarte todas esas cosas que aún no te he dicho. De construir castillos de arena en una playa o tocarte esas canas tan divertidas que te adornan y que casi ya no recuerdo. De dormir entre tus sueños.
¿Qué voy a hacer a partir de ahora? No lo sé. Si lo supiera todo sería más fácil. Al borde del precipicio, una vez más.
“Si no te quiere, no puedes hacer nada”, me decía un desconocido el otro día mientras los ojos se me aguaban. Me lo repetía y yo sólo atinaba a decir tartamudeando y débil: “me estoy curando. Poco a poco”. Pero hoy vuelvo a saber que sigo enfermo. Que me miento. Que esto no tiene remedio. Que me gustaría que todo fuese distinto, de otra manera.

http://es.youtube.com/watch?v=G2ME1nUv_8c

Pdt. A veces Juanes dice lo que quiero y yo no sé cómo
.

lunes, 21 de enero de 2008

La Madame


En una de esas calles estrechas de Las Palmas nos encontramos con un hombre mayor. Veníamos del Miau, no sabíamos la hora que era y queríamos más. Lagalleguiña buscaba el Sojo, pero este canoso señor nos llevó a La Madame, un after lleno de escaleras. Suplicamos y la entrada nos costó la mitad del precio estipulado, con dos consumiciones incluidas. Vamos, un regalo caído del cielo. No recuerdo qué bebimos, pero lo hicimos.
No había música, o al menos no la oía. Había gente y me miraban. Muchos. Me decían que era guapo, mientras ella hablaba con un argelino. La intentaba tocar, pero no se dejaba. Luego conocí a dos chicos que me ahuyentaban a los buitres de la noche. La luz era azul tenue.
En un descuido, lagalleguiña desapareció y regresó después de haberse estrenado con una chiquita que permanecía por allí. Su mimi le tiró para atrás, pero es que a veces hay destinos que no se pueden evadir. Yo no le puse mucho interés a la cuestión, pues estaba centrado en otros menesteres. Un chico me besó, pero ya tenía “asunto” y se alejó. Tenía barba.
Después llegó otro, de pantalón corto. Condición sine qua non para estar conmigo. Le acaricié las rodillas. Y caí rendido en su corbata. Quiso llevarme a un rincón oscuro, obviando que soy de luz y taquígrafo. Es una pena. Los baños daban pena y asco, y había miles de sofás repartidos por las miles de dependencias que allí había. Al segundo intento, se quedó dentro y ya no regresó. Eran como las diez y cuarto de la mañana y regresé a casa con una sonrisa en los labios. Tengo algunos teléfonos. Trece horas de marcha, suficientes para poner las cosas en su sitio. Al final, mereció la pena.

Pdt. Ya sé que va a ser una propuesta controvertida, pero me gustaría que Los40 dejara de emitir canciones de Fito y Los fitipaldis. Me hacen daño.

Las Palmas (IV)

A grandes males, grandes remedios. Por eso y ante la suspensión de mi viaje a la capital del Reino, decidí en un acto irreflexivo cambiar Madrid por Las Palmas. Ya lo sé, ese sitio trágico que me ha dado recientes alegrías, pero todas ellas basadas en el dolor de tu rechazo. La cosa surgió casi sin pensarlo. Tal vez por eso salió del modo en el que lo hizo.
Llegué al barrio de Los Pescadores pronto. Allí me tumbé un rato para descansar. La que se me avecinaba necesitaba que estuviese fuerte. Un sándwich de serrano y un delicioso bocata de calamares fueron la combinación perfecta. Con el Atlántico rompiendo contra las rocas como comparsa perfecta. La luna también estaba por allí y tuve tiempo de pensar. Con tranquilidad, aunque en dos ocasiones los locos del lugar me interrumpiesen. Uno era alguien que había llegado recientemente de Lanzarote, tras pasar unos días en Escocia. El otro, con una birra en la mano, sólo quería saber si la marea subía o bajaba. Sube, por supuesto, contesté.
La noche comenzó pronto. Como a las nueve. Justo cuando llegó el tercer vértice del Trío Calaveras, que tras findeaño -memorable jornada- volvía a unirse. La botella de ron Cacique, agua clara para ellos, nos duró un asalto. Y a las doce ya estábamos llamando a Rosita para irnos a quemar Las Palmas.
Hay pequeñas lagunas en mi memoria. No recuerdo bien si estuvimos en La Floridita. Sé que iba en coche y me reía. Donde sí sé que estuvimos fue en el Miau, pero estaba vacío. Aunque hablamos con un chico que luego nos llevó a otro sitio. Los chiringuays fueron nuestro siguiente destino. Música y baile, pero Rosita y el tercer vértice del trío Calvaras se fueron. Lagalleguiña y yo nos quedamos solos. Ella acompañada por un chiquito que se iba pronto por lo que un grupo de mariquitas nos indicó que el mejor lugar para continuar era el Miau. Allí fuimos, otra vez, y seguía vacío.

viernes, 18 de enero de 2008

Y al séptimo tono saltó el contestador


Hace meses sentía mariposas en el estómago. Eso me gustaba. Hoy las he vuelto a sentir revolotear llenas de colores. Estaban abrigadas dentro de mí. Como dormidas, pero vivas. Marqué ese número olvidado. Treinta días después. Los tonos sonaron. Siete. Después saltó un contestador anodino. No dije nada y colgué, pero el corazón me iba y aún me va a mil por hora. Había estudiado lo que iba a decir. Lo había memorizado. Una y otra vez. Lo tenía todo preparado, pero nadie descolgó el teléfono. Y ahora sigo en el limbo. Esperando. Como siempre. Añorando tu pecho. Tu piel. Triste. Al rato, vuelvo a respirar. Mi corazón se calma. Enciendo la tele y una canción aparece. Mientras tanto miro la vida pasar. Y no sabes cuánto me cuesta aceptar que no volverás. Por el momento miro la vida pasar. Sin venir a cuento alguien te vuelve a nombrar. Pasado el tiempo sigo igual. A veces pienso que he perdido la cabeza. Y algunos días sin razón. Ya ni me late el corazón. En esta cárcel de rencor... Fangoria canta. Y yo interiorizo las cosas que dice y miro mi teléfono móvil sobre la mesa dolorida del salón. Quieto. Sin sonar. Pero yo sigo ahí cerca de él. Con él y una lágrima tonta asoma.
_
Pdt. Tres cosas: El chuecaweekend se ha suspendido, por razones que se escapan al bien y el mal. La foto pertenece a V. Expósito. Comienzan diez días de descanso, busco llenar huecos.

miércoles, 16 de enero de 2008

De amor y también de pena

Me he despertado con una idea en la cabeza. ¿Por qué parece para algunos tan fácil enamorarse? No sé. Da la impresión de que hay quienes lo hacen de un modo sencillo. Casi sin darse cuenta. Como respirar o beber agua. Mientras para otros –para mí- se convierte en un calvario. En algo tortuoso. Pero más que eso, en dolor. Por eso me he acordado de una peli. De una secuencia que habla de amor y también de pena. De sufrimiento. De lo que cuestan las cosas. Esas que nunca te dije, pero aun así siento. Tal vez hoy las nubes te traigan hasta mí y pueda contarte que extraño tus dedos y tu nariz.

martes, 15 de enero de 2008

En marcha, otra vez

Estos días he estado K.O, como ya os dije. Pero aquí vuelvo. Tendré que ponerme en marcha, una vez más:

*Te he vuelto a soñar. Desde hace días ya no hablo de ti en público. Pero aun así sigo pensándote. A cada segundo. Este camino se está poniendo demasiado cuesta arriba. Ya sé el número de días que llevo sin tu voz y a mi pesar he memorizado tu número de teléfono.

*A veces, me gusta hacerme el valiente.

*He hablado con Ignacio. Todo va hacia adelante. El lunes o el martes le conoceré. Arranca la cuenta atrás para un mundo mejor.

*Un año. Tengo que esperar un año para operarme. Justo ahora que me había decidido. Vamos a ver qué me dicen el próximo mes de enero. Quiero tener otra vista de las cosas.

*He vuelto a hablar con La coja del tranvía. Ya creí que se había olvidado de mí y de mis tonterías. Hace tiempo que no la escandalizo con alguna de mis ideas. Tendré que enviarle alguna de mis joyitas pronto. También estuve con La chica del coche rojo y parece que no todo termina de ir bien. Estaré pendiente.

*Tengo que preparar todo para los carnavales. Hace unas semanas no me apetecía, pero ahora sí. Mucho.

Pdt. Hoy no hay canción. Tal vez mañana. Un abrazo a todos y gracias porque ya somos 200.

viernes, 11 de enero de 2008

El chuecaweekend

La primera promesa del año cristaliza poco a poco. Los Reyes me dejaron Madrid y, si nadie lo remedia, allí estaré a partir del próximo día 18 a las cinco de la tarde. Hora muy taurina. Tal vez pasee una vez más por Las Ventas.
Me apetece mucho este chuecaweekend.
Estuve a punto de caer. Fue una media hora muy crítica. Ayer por la tarde me faltó muy poco para llamarle. Al final no lo hice. No sé muy bien porqué. No tengo fuerzas para un nuevo rechazo. Encontré su número de teléfono que estaba escondido. Lo miré y quise olvidarlo. Por eso quiero ocupar mi tiempo. Para no pensar más en él.
Antes había escuchado a una transexual chicharrera como discutía con su novio. Pareces un jodido yonqui, le gritaba en La Brillante, una cafetería de Santa Cruz. La reconocí. Hace unos años era una estrella de televisión. Hoy sólo era eso, una transexual chicharrera venida a menos que discutía en mitad de la calle.
Ahora, tras escuchar las noticias que me devuelven a la realidad, estoy K.O. (knockout), es decir, fuera de combate.


http://es.youtube.com/watch?v=0gAAtZmzABk
_
Pdt. Esta fue la primera canción del día, cuando las cosas eran alegres.

miércoles, 9 de enero de 2008

No tengo nada que decir


Tierra. Suave e intensa.
La tranquilidad pasea en calma. Todos me miran y sé que lo hacen, pero no les veo.
A mi pesar, las cosas me salen bien.
De repente el silencio aparece y no tengo nada que decir.
He contado los días que llevo sin ti.
Antes había hablado con el señor Felicidad. Me hacía falta. Me ha prometido que pronto nos veremos. Siempre logra ponerme contento. Debe ser cosa de su nombre...
Los objetos se colocan con parsimonia delante de mí. Desde lejos los observo y sé que pronto el ciclo comenzará de nuevo. Uno distinto.
Una despedida triste. En tranvía.
Dos promesas: Madrid y Carnaval.
El tiempo pasa y me siento bien. Es un proceso irremediable.

_
http://es.youtube.com/watch?v=8YjeNGZBdNk

Pdt. La fotografía pertenece a O. Suárez y la canción, una vez más, es triste.

lunes, 7 de enero de 2008

El mar, unos vaqueros y tú


El mar está más lejos de lo que creía. Hace días que no sé nada de él. Tampoco de ti. La última vez que supe de ti fue el 19 de diciembre. Ya no sé cuántos días hace de eso. Tal vez sean demasiados para mis dedos. Sospecho que serás igual que las olas, que aunque no las vea sé que siguen rompiendo con fuerza contra los acantilados. Sin descanso. Nada las para. Tú tampoco te has detenido, supongo.
Esta mañana pensé en lo que te diré la próxima vez que te vea. Tal vez me preguntes por los Reyes Magos. Te contaré que me han dejado la promesa de un fin de semana en Madrid y una conversación de reconciliación con una amiga. En cuanto a las cosas materiales, unos vaqueros. Me los compré hace unos días, pero intuyo que también vale. Sabes que las cosas de este mundo me apasionan más bien poco.
Aunque pueda parecer mentira pensarte me alegra. Es una de esas cosas que me incitan a estar vivo. Sé como son las cosas y de cuáles son mis expectativas y posibilidades de futuro contigo. Más bien, escasas por no decir nulas. Pero aun así las ideas en las que eres protagonista siempre me dibujan una sonrisa.
Antes te decía que eras tierra. Por eso siempre vuelvo al mar. El que está debajo de las nubes. Me gusta estar allí viendo como las olas van y vienen y se rompen contra la arena de la playa perpetuamente.
_
Pdt. La fotografía pertenece a E.J.Rguez Naya.

sábado, 5 de enero de 2008

Regalos para todos

Mañana no habrá juguetes. Tampoco regalos. Supongo que no me habré portado lo suficientemente bien durante el último año, aunque no estoy seguro. Siempre puede haber alguna sorpresa. Los deseos son libres.
Recuerdo una vez que un cluedo que era para mí se me fue antes de que pudiera disfrutarlo. Cosas del dinero y de los compromisos adquiridos de otros. También se me viene a la memoria algún “no te acostumbres”... El día de Reyes no siempre fue un buen día. Traían regalos que unos creían que quería, aunque no supiesen cuales eran mis anhelos ciertos.
Pero no siempre fue así. A veces también encontraba bajo el árbol de la puerta del pasillo unos clics de playmobil divertidos. Y había chocolate caliente y silencio.
Pdt. Feliz día de Reyes. Si no sabes quienes son se llaman Melchor, Gaspar y Baltasar. Para más infomación busca en la wikipedia o en google. Un abrazo.

jueves, 3 de enero de 2008

Visitantes extraños

Estos días están pasando cosas extrañas en mi universo. Besos que no saben a nada. Caricias, que más que caricias parecen castigos. Rompecostillas. Como si quisieran atraparte sabiendo que nunca lo podrán hacer.
También risas cómplices. Halagos suaves. Todo mezclado en una coctelera. De esas que agita un camarero y que sirve en una copa alegre y que finalmente está coronada por un paraguas de esos de papel amarillo divertido, rojo y fucsia.
Después están los visitantes de este espacio. Que nunca sé cómo llegan ni tampoco por qué se van. Han arribado de sitios tan dispares como Uruguay, Alemania, Canadá o Argentina. También de mi adorada Francia. Burdeos me espera.
Y cómo no de algunas ciudades de España de las que nada sé. Pero están ahí y a veces me inquieta no saber de ellos, aunque casi siempre me agradan. Igual que lo hacen las canciones con las que últimamente me despierto. La última una de Palito Ortega. Lo sé, no tengo remedio. Pues eso, a disfrutar.


http://es.youtube.com/watch?v=nYoSIHlqwHs

martes, 1 de enero de 2008

Todo va a ir bien


No hay fotos, pero el día 31 y la noche del fin de año de 2008 fueron geniales. Todo fue perfecto. Risas y caricias. La música no faltó, ni los globos divertidos. El trío Calaveras quemó La Laguna. Tuve vocación gay en un pub hétero. Munchitos, ron con cola y cotufas. Una corbata con clase.

Gracias por compartir vuestros segundos conmigo.

Apareció en mi teléfono móvil, pero el mensaje no fue finalmente enviado. Tal vez no sea ni el mejor día, ni el mejor momento, pero tu silencio de estos días me ha puesto triste. Sé que nunca me querrás como a mí me gustaría, pero me hubiera gustado al menos un abrazo de amigo o un simple: “Todo va a ir bien”.

Después la zahorina me dijo que pronto conoceré a alguien que te me hará "flipar", pero con libertad... Si Bofilito se siente "abandonado" y viene a buscarte, rollete seguro. Tú compararás y elegirás.

Ya contaré si acierta. Apunto la fecha. Abrazos de colores.