martes, 27 de septiembre de 2011

La puerta está abierta

Ha llegado el final de este camino. Ya no hay vuelta atrás. Parece que éste es el momento antes del momento… Ya nada será igual. Toca decidir qué pasará a partir de ahora, qué sendero emprender. El regreso no cabe. Tampoco continuar sin avanzar, recordando lo vivido. Es el turno de saltar al vacío, de volar, de seguir soñando aunque el miedo no nos deje respirar. El corazón se te acelera y amenaza con salirse por la boca en busca de nuevos mundos, las rodillas te tiemblan como los juncos salvajes de Téchiné y el aire se ha detenido por completo. Las noches comienzan a ser más largas con la llegada del otoño y has desempolvado la colcha naranja. Te quedas sin excusas. La puerta está abierta, sólo tienes que cruzarla y descubrir que tus sonrisas son las que consiguen que las flores sean de colores y que junto a él ya no te hace falta alimento.

http://www.youtube.com/watch?v=MRR-zI6GdEc

Pdt. 'Dime, dime, dime, dime, amor; dime, dime que es verdad, lo que sientes en tu corazón es amor en realidad', reza el Dúo Dinámico en 'El final del verano'.

domingo, 25 de septiembre de 2011

En lo más alto

Era lo que siempre quiso. Había conseguido todo aquello por lo que llevaba luchando desde que recordaba. Estaba en lo más alto, junto a los focos y las estrellas. Cada día un millón de miradas se giraban hacia él. De todas partes venía gente que quería imitarlo. Reconocido y admirado, en la cúspide más alta. El chico perfecto. Pero no era feliz. Las piezas del puzle no terminaban de encajar. Algo fallaba. Por las noches le faltaba el aire y sin poder respirar creía que no volvería a ver otro amanecer. Cuando salía de la ducha se sentía pequeño, insignificante; y temía los ojos de condena cuando tocaba la calle. Y sabía que no se había portado bien con quienes le rodeaban, con los que lo habían colocado donde estaba. Les había convertido el día a día en un dulce infierno de exigencias y malas caras. Igual que se fustigaba les fustigaba y así se había pasado los años, sin piedad. Enfadado. “Lo reconozco, no lo he hecho bien”, confesó el día en que comenzó su descenso. Los resultados comenzaron a ser otros y se inició en el arte de estar en un segundo plano. La caída fue suave, pero implacable. En la travesía descubrió otras zonas, más áridas. Y en su desierto particular halló lagartos, sapos y culebras. En él también había vida y a pesar de haber estado en lo más alto no echó de menos los halagos ni las caricias porque ahora la ansiedad se había marchado y la máquina engrasada andaba sola dándole alegrías lejos de las fotos y los micrófonos.

http://www.youtube.com/watch?v=suRsxpoAc5w

Pdt. Le toca el turno a Maroon 5 y Christina Aguilera con su 'Moves like Jagger'.

viernes, 23 de septiembre de 2011

A la vuelta de la esquina

Aún el frío no ha llegado, aunque algunas hojas ya empiezan moribundas a caerse de los árboles. Ando y, secas, se me enredan a mi paso. Las aceras comienzan a resentirse y los portales cada vez son más feos, ya no queda nadie sentado a la fresca para adornarlos con guirnaldas de colores. Cosas del otoño y mientras avanzo me veo en diciembre paseando junto a ti. Lejos del tórrido verano o de las soledades de la primavera. Coges mi mano y me cuentas cuáles son tus pesadillas, las que te impiden conciliar el sueño. Las adornas con tu sonrisa y a tu lado sé que todo va a ser posible. Y todo está a la vuelta de la esquina, mientras alguna ola traviesa me moja las pantorrillas. Después abro los ojos, vuelvo en mí y me prometo que nunca dejaré de soñar…


Pdt. Este viernes toda una declaración de intenciones 'Girls Just Want To Have Fun' de Cyndi Lauper.

lunes, 19 de septiembre de 2011

Con las puertas tapiadas

Tomaba pasta con tomate y un poco de orégano. La había recalentado en el microondas, pero no sabía igual que la recién hecha. La movía con un tenedor de cuatro puntas de un lado a otro dentro de su pequeño plato hondo. La mareaba sin gracia y mientras miraba cómo el segundero avanzaba sin compasión. No podía tragar nada, había algo que le aprisionaba el estómago. Que no le dejaba respirar tranquilo. Su secreto. Ese que había hecho que las cosas fuesen como son y que no podía desvelar. No podía contarlo, tenía miedo. ¿Qué pasaría si lograse zafarse?, se preguntaba cuando echaba a andar los domingos al amanecer y soñaba con no estar más días solo. Pero no hallaba ninguna respuesta, sólo atinaba a mantener sus puertas bien tapiadas para que los príncipes azules pasasen de largo. Así es mejor, se repetía intentando convencerse como quien reza un avemaría soñando con que sus plegarias sean atendidas más pronto que tarde. Pero a pesar de los cerrojos alguna noche se tropezaba con algún ojo mágico y no podía evitar la tentación de mirar y quedar atrapado por lo que acontecía allende sus fronteras, la vida. Un día bailando en medio de una tormenta soñó con abrazar a Tim, con que las cosas fuesen sencillas, su secreto desapareciese y que lo del ‘todo vale hasta que caduca’ sólo fuese una ley muerta. Se merecía una oportunidad, repetía en voz baja… Y el reloj marcó las tres, el secreto siguió enredándole las horas y optó por guardar la pasta en la nevera hasta más ver.


Pdt. 'Ojalá pudiera borrarte', canta Maná.

domingo, 18 de septiembre de 2011

Las botellas vacías

Las botellas de ron vacías se acumulaban en el fregadero. Algún día las llevaría al contenedor, pensó contrariado, pero sería en otro momento, uno más propicio. Quizá cuando a la luna le dé por desaparecer o cuando las ranas comiencen a brillar por culpa de una lluvia de mentiras. Ahora le dolía un poco de agua y tenía sed. Y le daba por ponerse triste recordando sus ojos traviesos y que al final de los días él seguía sin quererlo.


Pdt. Algunos días las canciones son siempre tristes. Hoy le toca a Del Shannon y 'Runaway'.

sábado, 17 de septiembre de 2011

Y tu risa llenándolo todo

A veces pienso en cómo será la próxima vez que te encuentre. En cómo me gustaría que bailaras a mi lado o que tus pícaros ojos oscuros me abracen. Unas veces es antes de dormirme y otras justo después de comer. Tu imagen aparece de repente, sin previo aviso, y me hace sentir tranquilo. Como si ya nada fuese importante o como si las tontas preocupaciones del día a día se esfumasen para siempre. Incluso hay ratos en los que puedo sentir el calor de tu cintura en mi mano. Y tu risa llenándolo todo. Me propongo ganar esta batalla y me reto a saber perderme entre tus brazos y también dejar ganarme por tus ironías y golpes bajos. Lucho para aprender a olvidar pasados inhóspitos y confieso que en esta ocasión debo dejar que entres sin reparos. Me vienen a la cabeza tus patillas y deseo perderme en tu cuello. Todo esto pienso a veces y también respiro en paz porque ahora tu risa está llenándolo todo.

http://www.youtube.com/watch?v=6ViNHJgEKzk

Pdt. Rescato 'Mi vida por un hombre' de Mónica Naranjo. Buen día...

lunes, 12 de septiembre de 2011

Está aquí

El pequeño Matt levantó las orejas al mismo tiempo que abrió los ojos todo lo que pudo. Después encendió la luz de un salto y el corazón le comenzó a galopar tanto que casi se le sale por la boca. Salió disparado de la habitación del fondo hacia la puerta, bajó las escaleras dando brincos y se tropezó con la calle, llena de aire para respirar. La bombilla de la farola estaba apagada pero le dio igual, la oscuridad no le impedía saber que había llegado. ‘Está aquí, está aquí, está aquí’, repetía una y otra vez entre risas y fiestas. Doña Eustaquia se asomó asustada al balcón preguntando a gritos por lo que sucedía a estas horas de la madrugada. Las ventanas se iluminaron poco a poco hasta que todo el barrio estuvo despierto. Las estrellas comenzaron a bailar como si fuese la noche de San Lorenzo y a los girasoles del parque les dio por brillar a ratos. Una ambulancia acompañó la algarabía con su sirena y la carretilla del barrendero tocó la pandereta. Al final todos estaban felices. ‘Por fin el amor ha regresado y quiere quedarse’, anunció Matt.


Pdt. Regresa el grupo No te va gustar con 'Simplemente yo'.

domingo, 11 de septiembre de 2011

El primer paso

Le despertó el olor a fritanga del segundo. Miró de reojo el despertador que implacable marcaba cinco para las doce. La persiana no dejaba entrar la claridad absoluta del sol. Aún le dolía un poco la cabeza y no sabía bien qué día de la semana era. Se arrastró hasta el baño y allí evitó mirarse al espejo. Siempre lo hacía. Hacía demasiado tiempo de la última vez. Se lavó la cara rápido y se arregló el pelo encomendándose a los años de buen tino. Sintió algo en el estómago. Un tímido ardor que le subió por la garganta y comenzó a hacerle sentir bien. Después abrió los ojos y se miró. Todo estaba en su sitio y se detuvo en los ojos. Estuvo un buen rato hasta que perdió la noción del tiempo. Quiso redescubrirse, conquistarse batalla a batalla. Supo que había estado demasiado tiempo en un tren que ya no partía a ninguna parte y que sólo debía cambiar de andén. No sería fácil, pero hoy había dado el primer paso.

sábado, 10 de septiembre de 2011

Esquivando la verdad

Comenzó a responder despacio, con calma, y tuvo la sensación de que no era él quien hablaba. Amable comenzó a explicar por qué la Luna parecía triste a este lado del Atlántico y también por qué su cama ahora estaba vacía. Su alocución duró unos segundos, los justos para dejar satisfecho al inquisidor, que le permitió ir en paz. Después del silencio regresó a casa sin mirar los detalles del camino. Cuando quiso darse cuenta ya estaba en la ducha, apenado de regresar a la guerra. El agua fría le calmaba las heridas y deseó marcharse una vez más. Huir. A Amable no le gustaba mentir, pero a veces querer esquivar algunas preguntas le obligaba a esconderse en recovecos imposibles de transitar con la verdad. No podía desvelar su secreto. No lo podía hacer, aún no. Quizá nunca podría. Se inventó un pasado, un novio que partió un buen día a la China, una familia feliz que desayunaba junta los domingos por la mañana mientras leía ‘El País’ y un acento extraño. Construyó un edificio con enredos. Algunas noches se despertaba y le costaba respirar. Una nebulosa de testimonios falsos no le dejaba. Y al final siempre se topaba con su secreto. Se dijo que la de hoy sería la última vez, que no volvería a mentir. Amable salió de la ducha y mientras se secaba con la única toalla seca del planeta se tropezó con un desconocido que le miraba atento. Extrañado se frotó los ojos y los abrió cuanto pudo. Amable se detuvo un instante, pero no se reconoció ante el espejo…

http://www.youtube.com/watch?v=vxqq9clDl88

Pdt. Suena Luis Miguel y su 'Culpable o no'.

martes, 6 de septiembre de 2011

sábado, 3 de septiembre de 2011

Imaginando que mantenían una conversación

La primera vez que le vio, Saxo estaba sentado en un banco. En una plaza. En uno de esos que algún día fueron blancos, pero las manchas del tiempo lo habían dejado irreconocible. El sol estaba a punto de salir y el aire olía a la flor de los hibiscos. Nunca olvidará ese olor. La cafetería de enfrente estaba llena. En ella se juntaban los recién levantados que iban de domingo a pasear el perro con los trasnochados que no querían aún acabar el día. Las nubes amenazaban lluvia, pero había un poco de bochorno. No dijo gran cosa y a veces, con el paso de los segundos, agachaba la cabeza y la escondía entre las rodillas. Después le dejó en casa, sano y salvo. A los pocos días se volvieron a encontrar, pero ya Saxo no le recordaba o eso le hizo creer. Intentó saludarlo, pero no le respondió. Silencio y Bajo quedó detenido en el aire. Han dejado de oírse las trompetas, pensó algo triste. A partir de ese día volvió a encontrárselo muchas veces, pero nunca se atrevieron a cruzar una sola palabra. Bajo le miraba a escondidas y los miércoles por la noche lograba soñar con sus ojos, que se le habían quedado clavados en la memoria. Ahora estaban los dos en aquel local que más que local parecía una caja de zapatos, muertos de calor. Apoyados en la pared miraban al techo, buscando fresco que respirar. Sin querer, Bajo se quedó a su lado imaginando que mantenían una conversación. Al rato alguien abrió la puerta y les tocó irse. Cada uno por su lado, pero sus ojos sabían que tarde o temprano volverían a encontrarse…


Pdt. Llega La sonrisa de Julia con 'El hombre que olvidó su nombre'. Gracias...