lunes, 11 de marzo de 2013

Ineludible

Amanece. La claridad va haciéndose entre las nubes de la noche y no sé qué pasará este extraño lunes. A ratos pienso en las alegrías y en lo que está por venir, pero en otros instantes sólo me queda la pesadumbre, las cosas tristes, lo que fue... Y en esas me debato, entre los que sólo viven recordando lo bonito que fue el pasado y no me queda otra más que resistirme. Me apetece el presente, los buenos momentos. Sé que están aquí y que no hay que irlos a buscar a Tombuctú. Ni a ninguna otra parte. Clarea. Dicen que éste es tiempo revuelto y que hay que esperar a que cada historia se asiente. A que las piezas terminen de encajar en un puzle diferente. Algunas nubes se resisten a que el sol aparezca. Insisten en querer quedarse. Nadie ha preparado el desayuno. No hay ni tostadas, ni jugo de naranja, ni leche caliente. Sólo una nevera vacía. Da gracias a que tienes nevera, me susurran al oído y me rebelo. Me cansan esos discursos, lo de siempre. Déjame quieto, en paz, replico y se vuelve a hacer el silencio. Se escucha a los primeros barrenderos del día que incansables limpian las calles con sus hojas de palmera. Sin descanso. Procuran dejarlo todo sin mácula, pero quizá sea que he perdido algunas de mis esperanzas, que me he resignado. Tal vez sea eso. Algún tono rojizo enturbia el cielo gris plomo. Parece que el amanecer es un compromiso ineludible. Está aquí, puntual a su cita con los vivos, pero qué pasa con los muertos...

2 comentarios:

Romina dijo...

É pau, é pedra, é o fim do caminho
é um resto de toco, é um pouco sozinho
é um caco de vidro, é a vida, é o sol
é a noite, é a morte, é um laço, é o anzol

são as águas de março fechando o verão
é a promessa de vida no teu coracão

http://www.youtube.com/watch?v=_9iEeHlT10o

beso

Ce Castro dijo...

Muchas gracias, Romina por el link Un abrazo