No es fácil ni demasiado sano tener el control en el amor. Crecí con la idea tatuada a fuego de que todo iba a ser, por muy difícil que pareciera. Que crecería, a los veinte trabajaría, luego me casaría, tendría familia y así iban a ser las cosas inevitablemente. No había otras posibilidades. Con 25 años ya tenía que estar todo resuelto. Y estas certezas también estaban en las canciones, aunque hubiera mil señales de que no siempre las historias de amor terminan bien. Que eso me fuera a pasar, lo de que fuera mal, ni se me pasaba por la cabeza. Por eso me gusta ‘La media vuelta’ porque hay alguien capaz de controlar la situación, de dejar ir porque sabe que al final todo será. Hoy ese machismo tóxico me abruma, pero tantos años de patriarcado dejan poso. ¡Vamos, que si lo dejan! Sí, lo hace y en esta canción siempre me he visto siendo al que dejan ir, pero también el que se ve obligado a dejar marchar. Abandonado, incapaz de controlar y también incapaz de ser querido. Por eso la sigo escuchando. Y también porque Luis Miguel es el mejor cantante. Le vi una vez de lejos, de lejísimos, pero lo importante es que le escuché en directo. Aquel concierto fue inolvidable. Fue cuando viajó con Mariah Carey y hacía sol, mucha luz. Entonces creo que estaba feliz, pero esa historia la contaré más adelante.
'La media vuelta' de Luis Miguel (1994)
Pd. Luis
Miguel en su álbum 'Segundo romance' incluyó ‘La media vuelta’. El
disco alcanzó el número 1 en las listas de popularidad del Billboard a finales del año 1994. La canción es de
José Alfredo Jiménez.
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