martes, 30 de septiembre de 2014

El vaso


Aquel jueves de mayo supo que el vaso estaba a punto de rebosarse y, sabía, que si finalmente se derramaba todo sería mucho peor.

martes, 23 de septiembre de 2014

Afectos prohibidos

Rebuscó entre sus viejos libros y, con la vida entre sus dedos, halló aquel extraño cuento que narraba las andanzas de dos seres purpúreos, que de tanto quererse terminaron apartándose tanto el uno del otro que la Luna había dejado de ser Luna y el Sol, apartado y triste, sólo aspiraba a cantar tristes canciones de amor. Aquellas devastadas páginas la llevaron a aquel pasado aún presente en el que los rencores seguían vivos. ¿Cuánto tiempo había pasado desde toda aquella tormenta? ¡Quién sabe! Y cerró el libro, abrumada por tanto polvo añejo. También cerró los ojos porque sabía que todo su afecto estaba todavía prohibido. Quiso pedir perdón o que la normalidad de las cosas se impusiese, pero sospechaba que cuando la tormenta pasa, la calma que sobrevive nunca es igual a la que propició la catástrofe...

miércoles, 17 de septiembre de 2014

Batallas para librar

Después de un momento álgido viene la nada, tras los esfuerzos más ímprobos llega el vacío y, siempre, el chillido más agudo da paso al silencio más absoluto. Andas por la calle y te da igual que todos te detengan, ya no tienes a dónde ir, ni refugio que te apetezca habitar. La batalla ha concluido y aquello que daba sentido a los días se ha desvanecido. Y no puedes mirar al cielo porque ese sol sofocante de septiembre te ciega los ojos, que no las entendederas. Andas por debajo de los parasoles que te encuentras, pero nunca hay suficientes. Bañado en sudor decides continuar, ya que esa es la decisión menos mala de todas. Tampoco miras al suelo, el asfalto escurriendo no dice la verdad, siempre miente. Y sin destino es harto complicado llegar a ningún sitio, pero sigues sin detenerte. Sueñas con que mañana, como por arte de magia, aparezcan nuevas batallas para librar.

'Steal the light', de The cat empire 

lunes, 15 de septiembre de 2014

Pensamientos impíos

Unos labios rojos. Letras descolocadas. Un canario que no canta. Un cubo y una fregona desterrados. La vida se le había convertido en un puzle complicado de organizar. Cada pieza iba a lo suyo y así, de este modo, era harto difícil vivir. Lo peor llegó justo el día en que se dio cuenta de que quizá nunca había sido tan bueno como había sospechado. Siempre había querido ser mejor, una persona buena. Pero lo cierto es que por el camino se le había olvidado y ahora dudaba de sí mismo. No era bueno y lo sabía. Cada mañana al mirarse al espejo, éste desafiante le vomitaba todas sus pequeñas miserias. La bondad había desaparecido de su piel y algunas noches tenía pensamientos impíos. El tiempo pasa para todos y mientras unos ascienden, otros caen irremediablemente. Así era y desde aquello había dejado de tener ganas de continuar.

viernes, 12 de septiembre de 2014

40.000 páginas vistas



Las estadísticas dicen que Azul Tokio ha alcanzado las 40.000 páginas vistas y sus 1.042 entradas han recibido 1.279 comentarios. España, China, Estados Unidos, Argentina y Colombia son los países desde dónde más visitas se han realizado. Gracias.

jueves, 11 de septiembre de 2014

Honestidad mínima

De pasada leyó una minúscula frase que alguien se había dejado olvidada en algún rincón de Internet. Un héroe muere, pero otro es descubierto. Justo en ese instante se detuvo un segundo. Tenía que digerirla bien. La prisa, en estos casos, no siempre es buena consejera. Un héroe muere, pero otro es descubierto. La repensó un buen rato y se entretuvo recordando a esos héroes de plástico que cada noche salvan a la multitud en sus canales de televisión. Esos héroes que hablan de todo y que siempre dibujan la verdad con su mano siniestra. Lo revisten de una honestidad endeble, en algunos casos, mínima. Hasta logran confundir lo que es cierto de lo que no es. Pero ellos, siempre héroes, salen victoriosos de todos los embates. Son los jefes del coro y como tales iluminan lo que tocan y son seguidos por un selecto grupo de respetables. Y esos respetables aplauden cuando el viento les es favorable, pero a poco que la cosa se tuerza no se amilanan al detallar las pequeñas miserias de sus héroes. Un héroe muere, pero otro es descubierto. Y la masa no escucha, más bien aplaude a sus héroes, que para eso son suyos. Y estos, irremediablemente, siempre caen de pie.

'One thing', de Peter and Kerry 

domingo, 7 de septiembre de 2014

Aquella casa estaba vacía de palabras

Aquella casa estaba vacía de palabras. Nadie decía nada en voz alta. Allí nunca nadie había leído un libro y mucho menos había recitado una poesía. Así, era muy complicado que aquel desdichado vástago se entregase al gozo de la lectura. Bajo esta triste maldición creció, pero sin saber muy bien el modo en que lo hizo un día cayó entre sus dedos una novela de amor. Se dejó llevar y pronto se supo atrapado por aquellas desdichadas letras. Gracias a ellas entraba en otro mundo, uno en el que la gente actuaba de una forma distinta, que transitaba las líneas de la vida de puntillas o dando volteretas. Él sólo había visto a gente que sólo andaba en línea recta. Había unos que luchaban y otros que, rendidos, se dejaban hacer. Ellas, por su lado, eran traviesas y les gustaba vivir mientras ellos se empeñaban en gastar su frágil tiempo en el difícil arte del aburrimiento. Cuando cerró aquellas tapas duras y de cartón, supo que a partir de aquel día ya nada sería igual.

'A song about love', de Jake Bugg