La
luz brilla por fin. Incluso de las cosas más feas o tristes puede rescatarse
algo bonito. No es sencillo, pero tal vez sea culpa del verano, del sol o del
mar. Las olas se lo llevan todo, también la brisa de verano. La maresía está
ahí carcomiéndolo absolutamente todo y sin embargo su sabor es profundamente
sano... y es dicen por ahí que no hay mal que por bien no venga. Y me hoy
quiero creerme todas las mentiras, aparentar que todo va bien, que la esperanza
se impondrá más pronto que tarde.
If I were sorry, de Frans
Pd. Quizá
ande un poco distraído con las faltas de ortografía.
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