Ganar o perder
Mañana todo cambiará, todo será distinto. Faltan apenas
veinticuatro horas y nada será igual. Aunque todo comenzó hace un año, mañana
todo se concretará. No habrá vuelta atrás, ni falta que hace. No se trata de
emprender el camino acertado, ni de tener miedo a equivocarnos; esto no es un
juego de ganar o perder porque, al final, no hay premio. La vida avanza y
debemos hacerlo con ella, a su lado. Mirando todas las ventanas, las de colores
y también las otras, las que no los tienen. No podemos detenernos más tiempo. Unas
decisiones nos llevan a un sitio, otras a otro, y lo que apetece es que sean
buenos lugares, con cosas nuevas, aunque nos den vértigo. Se trata de volver a
creer en nosotros, de confiar. Se trata de eso y, también, de ser felices. Nos toca.
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