Los besos han regresado

Fue a media mañana cuando la del quinto bajó a toda prisa por las escaleras. Buscaba a la del primero para contarle la última buena nueva. Mientras hablaban la del primero se echó las manos a la cabeza y salió disparada para decírselo todo al dependiente de la Ferretería. Don Juan, más precavido, hizo una llamada y le trasmitió todo lo sabido a su mujer que estaba en la peluquería haciéndose unas mechas porque las que le hizo Maripaz la semana pasada no le habían quedado bien. Yulius con el secador en la mano se quedó medio muerto cuando escuchó lo dicho por Doña Mirta y se lo dijo al resto de sus clientas, pero fue Teresita, la vendedora de cupones, la única que corrió para susurrárselo al oído al cajero torpe del súper mientras compraba unos plátanos para desayunar. Éste pasó un rato intranquilo hasta que decidió enviarle un sms a su novia para corroborar todos los datos. En la playa, Chaxi se lo comentó a Paquito, el enfermero con quién le pone los cuernos a su novio, y el sanitario no esperó para exigirle más detalles a C.J. el dueño del gimnasio de la esquina. Por allí no sabían nada, ni siquiera Tobby el perrito cojo de Aroa, la niña que siempre saca todo sobresalientes, por lo que C.J. ni corto ni perezoso hizo lo propio y se lo consultó a la concejal de Urbanismo, que es muy amiga suya además de clienta habitual. Rápidamente la edil envió una circular a todos los funcionarios y paralizó el Ayuntamiento. Fue así como se enteraron los periodistas. ‘Los besos han regresado’, fue el titular de portada en todos los periódicos de la provincia occidental al día siguiente.

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Pdt. El Canto del Loco también vuelve a Tenerife a finales de este mes por lo que habrá que ir a recibirlo y para abrir boca: 'La suerte de mi vida'.