No hace frío. El verano está junto a mí, igual que tú. En el cielo. Mis mejillas son tuyas ahora, después de tantas horas de cortejo y de dimes y diretes. Bajo las estrellas todo parece mejor. Era lo que querías, o al menos eso creía yo... Y te vas. Escucho tus pisadas alejándote de mí y una bonita canción mientras Santa Cruz duerme. En un segundo la fresca de la noche se convierte en mi única compañía y no entiendo qué diablos ha sucedido. Me tomo la última copa de la noche y medito. Un nuevo misterio por desvelar. Quieres algo y cuando lo puedes conseguir –cuando por fin accedo-, huyes lejos, sin dar explicaciones... ¡Qué raro es el ser humano, lleno siempre de temores vanos!http://www.youtube.com/watch?v=qVloxKuhfh0
Pdt. Todo se detiene porque Luis Miguel canta: 'Te vas porque yo quiero que te vayas; a la hora que yo quiera te detengo; yo sé que mi cariño te hace falta porque, quieras o no, yo soy tu dueño...'
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