martes, 15 de enero de 2013

Darle la vuelta a la adversidad

Amanecía a una nueva vida. Hache se había levantado temprano, mucho antes de que sonase el radiodespertador. La costumbre seguía imponiéndose a la realidad. Se acercó por inercia a la nevera olvidándose por completo de que llevaba un par de días completamente vacía. Eran malos tiempos para la lírica y también para la economía. No tenía nada que hacer y el paso de los días lo empeoraba todo. A pesar de ello, Hache intentaba darle la vuelta a la adversidad y por eso se agarraba al día a día, al amor y a esa certeza de que irremediablemente en esta vida no hay nada invariable.

2 comentarios:

Lola Birlanga Urbán dijo...

No estoy yo de acuerdo con eso de que en esta vida no hay nada invariable...


www.sobrevolandoloscuarenta.blogspot.com

Ce Castro dijo...

Ups... dime una...