miércoles, 30 de octubre de 2019

Diógenes

Guardaba demasiadas cosas, tantas que no sabía ni que las tenía en su poder ni dónde las amontonaba. No solo malos recuerdos. Lo conservaba todo, jamás tiraba nada. A veces ideaba sistemas geniales para archivarlas. En teoría, utilizándolos podría hallarlas en un instante, pero eran tantos los tesoros que se le olvidaba buscarlos. No se busca algo que no se sabe que existe, igual que las noticias que no se cuentan. No era síndrome de Diógenes, era simplemente que no le gustaba tirar nada. Quien guarda siempre tiene, se decía cada mañana y también a la hora de la cena. Es mucho mejor rebuscar en la despensa que ir a un supermercado a medianoche a por unas velas o por un tupper al chino del polígono. Y sabía, por el paso de los años, que el que busca siempre encuentra…

How do you sleep?, de Sam Smith

Pd. Hace unos días oficialmente, por la hora, es invierno, aunque el frío esté aún por llegar...

domingo, 27 de octubre de 2019

En el lado bueno

Ya a nadie le importa la verdad. Da igual como sean las cosas, siempre gana el primero que las cuenta, aunque su relato sea un puro invento. Hablan y hablan, pero no escuchan. Les da igual. Se sitúan en una esquina y desde allí predican, justificando lo injustificable. Que los nuevos hacen tropelías, da igual, porque los de antes las hacían más; que unos ponían el cazo, malo se dicen mientras comienzan a abrir sus manos porque saben que algo les caerá… No les importa la verdad, porque la verdad son ellos. Siempre con un dato más real que cualquier otro, siempre más cerca del meollo de las cosas que nadie… Viendo la vida de blancos y negros, con buenos y malos. Y ellos siempre en el lado bueno de las cosas y sentenciando a muerte, matando de hambre…

Lie, de Lukas Graham

Pd. A veces los pensamientos se me arremolinan, se me atragantan...

jueves, 24 de octubre de 2019

Momentos

La vida está llena de canciones... Cada una tiene su momento. Aquí unas cuantas:

Pa dentro, de Ana Mena y Sean Kingston
Escúchame, de Camela
Algo de ti, Paulina Rubio
5 sentidos, de Dvicio y Taburete
I don't care, de Ed Sheeran y Justin Bieber
Enchochado de ti, de Don Patricio
Sucker, de Jonas Brothers
Quedará en nuestra mente, de Amaia
Maldición, de Lola Índigo y Lalo Ebratt
Beautiful people, de Ed Sheeran
Fresas salvajes, de Camilo Sesto
Suave y sutil, de Paulina Rubio
Aunque me cueste la vida, de Pastora Soler
Someone you loved, de Lewis Capaldi
Aguante, de Mala Rodríguez
Dance monkey, de Tones and I
Me quedo contigo, de Rosalía
Circles, de Post Malone
y Nadie pudo volar, de La Casa Azul.

lunes, 21 de octubre de 2019

Otoño

Siempre fui un chico de otoño, aunque ahora me guste más el verano. Deseaba tanto que llegase septiembre y dejar atrás el buen tiempo. Y eso que los árboles de mi barrio nunca perdían las hojas. Solo lo hacían los castaños y los almendros. Allí todo seguía un poco igual, no había grandes variaciones. El mal tiempo llegaba después, en invierno. Me gustaba esa idea de un poco de estar en el principio del fin. Volver a la rutina, a que todo fuera igual. Sigo siendo de otoño, de las hojas ocre, del mal viento, de no saber si camiseta o suéter… pero el frío me duele demasiado…

Nunca nadie pudo volar, de La Casa Azul.

Pd. Debes desistir, tienes que olvidar... nunca nadie pudo volar, escapar de aquí... 

lunes, 14 de octubre de 2019

Malas personas

La vida de alrededor a veces no es como sospechamos. Eso le pasaba y sobre todo se daba cuenta cuando llegaba a aquella oficina tan inhóspita donde todos le sonreían, pero ninguno la quería. Solo palabras bonitas y zancadillas sin querer. No quería darse cuenta pero todos allí tenían sus lenguas demasiado sueltas y sus mentes, poco acostumbradas al esfuerzo, solo se dedicaban a idear maldades. Como si fueran malas personas…

Circles, de Post Malone.

Pd. Ésta es la entrada 1.502

viernes, 11 de octubre de 2019

Ese niño

Nunca fui ese niño con el que sus padres bailaban a lo loco y divertidos en las fiestas de cumpleaños. Nunca fui ese niño con el que se reían a carcajadas y de cada pequeña cosa hacían una experiencia eterna, imborrable. No, no fui ese niño. No lo fui... Era el que en silencio quería que se pusieran collares de flores, faldas alegres… También quería risas, comidas inventadas y vacaciones inolvidables…

Me quedo contigo, versión de Rosalía.

Pd. Pues eso. 

viernes, 4 de octubre de 2019

Beautiful people

Y al día siguiente llegó a la oficina y había revuelo. Tanto que quiso darse media vuelta y regresar a la cama. San Martín estaba siendo coherente y al resto se le había ido la olla. Le habían montado un motín porque querían prohibirle a la doña de la limpieza que utilizara la máquina del café. Así eran ellos, amables y serviciales, pero a la hora de la verdad no les temblaba el pulso para rajarte el cuello. Eran gente guapa, divertidos, inteligentes y siempre a la última. Con y de clase. Seguro que mañana, cuando la señora llegara a las seis de la tarde, no sospecharía nada, comenzaría a hacer sus tareas y cuando terminase su jornada le llegaría la llamada… Esa llamada en la que le decían: hasta aquí, bonita; no vuelva más. Todos la rodearían, apoyándola, dándole sus hombros, y ella desolada y sin trabajo se despediría de ellos pensando que eran los seres de luz más increíbles con los que nunca se había topado…

Dance monkey, de Tones and I.

Pd. Aquí vamos, remontando octubre...