sábado, 21 de abril de 2012

Una nevera llena de maravillas

Tu boca lo puede todo. Un día apareciste y aparentemente todo continuó igual, pero no fue así. Calladamente fuiste cambiando los cimientos, después la estructura de mi hogar hasta que llegó un minuto en el que supe que yo había cambiado. Me daba por pensarte en los tiempos muertos de cada partido o cuando veía una peli de vaqueros en la tele. De una u otra forma siempre aparecías tú y eso, lejos de desazonar, me calmaba la piel. Ahora duermes y tus cambios de humor me parecen divertidos, igual que tus ocurrencias o tus miradas de pillo. Tu boca lo puede todo y me atrapa cada vez que me la acercas para arrancarme la piel de los labios. Son míos, me dices intenso, y entregado acepto porque mi dicha es igual a la de los hambrientos que arrodillados se sacian en una nevera llena de maravillas o a la de los ciclistas que suben y bajan montaña respirando aire puro entre frondosos bosques de laurisilva. Tu boca lo puede todo y por eso he querido conquistarla, tenerla entre mis dedos y retener hasta la eternidad en mi memoria todo lo que dice. En ese empeño estoy mientras duermes a mí lado…

5 comentarios:

Fedor dijo...

Tus letras lo pueden todo..

Ce Castro dijo...

Ojalá tuvieses razón... Un abrazo

Fedor dijo...

¿Qué paso entonces con las metáforas?

Miss Migas dijo...

Tu boca lo puede todo cuando te arrimas a mi oreja y me susurras palabras bonitas. Muá

Ce Castro dijo...

me encantan las palabras bonitas... gracias Miss Migas