martes, 13 de noviembre de 2018

Que todo se sepa

Ahí vamos. Poco a poco. Con sus días buenos y también malos. Así es. Intentando no detenernos demasiado tiempo en los rincones tristes del camino. Decir sin decir porque si dijese ya no podría disimular que todo va bien. Puedo aguantar así, en silencio, pero sé que no podría soportar que todos lo sepan. La vergüenza pesaría demasiado. No podría seguir aparentando. O no me quedarían excusas. Con qué cara iba a continuar como si nada pasase. Ese es mi miedo, que todo se sepa porque ya no habría vuelta atrás...

Chicken wire, de Gecko Turner.

No hay comentarios: