viernes, 19 de agosto de 2016

Los dos bailando

Pasos de cero, de Pablo Alborán.

Ojalá tuviera un plan. Ojalá supiese qué diablos hacer ahora. Ojalá, pero me temo que se me han acabado las ideas. No sé para dónde tirar. Creo que se me han agotado las ocurrencias. He intentado todas las opciones y, sin embargo, no he conseguido nada: solo fracaso tras fracaso. Y aquí sigo, tirado en mi cama, abrumado por el día a día, por los monstruos de la vida y, cómo no, por la escasez de aire puro. Ojalá la vida te enseñase a vivir, a salir del atolladero, a respirar por los resquicios. Ojalá llegue de una vez la tormenta que arrastre lo malo y nos deje a los dos bailando canciones bonitas. Sería el tiempo de los besos, de las caricias y también de las alegrías. Ese tiempo debe llegar; debe estar por ahí extraviado, esperando ser alcanzado. Ya nos toca...

No hay comentarios: