viernes, 30 de septiembre de 2016

Yo te acuso


Cuando pude o debí no lo hice y, quizá, hacerlo ahora es hacerlo a destiempo. Pero al final todo llega... Yo te acuso de mentirme; te acuso de aparentar blanco cuando en realidad era negro; te acuso de no ser valiente; te acuso de ser el culpable de todo el daño que me causaste; te acuso de tu altanería; también te acuso de tu silencio; te acuso de tus miserias y, cómo no, de tus fanfarronerías; te acuso de tu voz rasgada; te acuso de tus camisetas de marca y también de los pantalones de pinzas; te acuso de pasar página. Yo te acuso, te acuso mil veces de no quererme...

martes, 27 de septiembre de 2016

No quiero lunas


¿Cómo vivir sabiendo que cada vez eres un poco peor? ¿Cómo continuar, siendo consciente de que no estás a la altura? ¿Cómo seguir? Hay mañanas en las que todos mis miedos me asaltan, igual que lo hacen los ladrones en los cajeros verdes cuando las princesas se ponen tristes tras la luna. Todo está tranquilo y de buenas a primeras, con el minúsculo impulso de un soplo de aire, la tragedia se hace inmensa. Lo bueno deja de estar y solo quedan reproches. Y así no siempre es fácil pedir perdón. Avanzas hacia el desastre y no sabes cómo dar marcha atrás, aunque lo deseas con todas tus fuerzas. Ojalá la vida fuese sencilla.

Quiero más de ti, de Marta Sánchez y Hombres G.

domingo, 25 de septiembre de 2016

El lector de Julio Verne

Yo leía otra clase de novelas, relatos de naufragios y tormentas […] para soportar la calamitosa aventura de vivir en la casa cuartel de Fuensanta de Martos en 1948. Los muertos de papel son leves, su agonía breve, su memoria corta, y en los libros que me conseguía Pepe el Portugués, sus nombres además ajenos, tan extraños que sonaban a falsos. Los muertos de papel nunca dejan viudas, ni huérfanos que lloren más de dos líneas, por eso me gustaban aquellos libros, y por eso nunca habría podido denunciar a Sonsoles, contarle a mi padre la verdad. Así, unidos en la complicidad de una fuga destinada al fracaso, entregado cada uno a su propio desaliento, llegamos hasta una soleada tarde de marzo en la que Sanchís interrumpió abruptamente una de aquellas clases que nunca llegaron a serlo en realidad.

El lector de Julio Verne, Almudena Grandes

Get in line, de Ron Sexsmith

Pd. Quizá los mejores momentos de las últimas semanas se las debo a este libro.

viernes, 23 de septiembre de 2016

Mala persona

No es fácil admitir que no se es una buena persona, que aunque en apariencia seas alguien normal –o incluso hasta algo bonachón- en el fondo no lo eres y que todo lo has construido lo has hecho sobre una premisa falsa. Tampoco es sencillo vivir con miedo de que tus pies de barro se vayan al traste. Este mundo de apariencias es lo que tiene, nada o casi nada es lo que parece. Es cómodo seguir avanzando, como si nada sucediese y, sin embargo, no puedes porque el miedo te atenaza. Bajo el yugo de ser descubierto intentas sonreír, soplar a favor y nunca retroceder. Ojalá pudiera pasar la mopa y que todo lo malo desapareciera, pero no es así. A veces, tiendes tu mano para ayudar al necesitado, das de beber agua cristalina al sediento… Y en el fondo nunca es suficiente para revertir lo que sabes, da igual lo que hagas: eres mala persona y eso a estas alturas es imposible de solventar.

Bajo el volcán, de Love of Lesbian.

Pd. Nunca es tarde, si la dicha de descubrir a Love of Lesbian es buena...

martes, 20 de septiembre de 2016

Si yo fuera otra



Ser el vino que te embriaga,
la que enturbia tu mirada.
Convertirme en tu guarida,
ser el corte de tu herida,
ser el juez y la condena 
Y la cura de tu pena.

Si yo fuera otra, Marlango.

domingo, 18 de septiembre de 2016

Elecciones

El miedo de unos es igual al miedo de los otros, pero en sentido inverso. Mientras unos dicen apostar ciertamente por la estabilidad otros rechazan lo viejo por podrido, pero en realidad los primeros tienen miedo a lo que pudiera venir, con esa resignación típica de las clases acomodadas, acomodadas a sobrevivir sin soñar nada más; y los segundos luchan porque están cansados de agachar la cabeza, de perderlo todo. Ninguno sabe qué es lo mejor, ojalá hubiera un manual de instrucciones. Unos tienen miedo a reivindicarse y los otros arrasan con todo, como si fueran depositarios de las verdades absolutas. En el fondo, todos pierden mientras ellos, los de siempre, ganan, se llenan los bolsillos y viven sin sospechar siquiera que tanto los primeros como los segundos no saben qué es vivir sin preocupaciones, no entienden ese miedo suyo al mañana y, por supuesto, no les interesa tocarse con ellos. Qué fea es la pobreza, dicen entre dientes mientras hacen chocar sus copas de vino del bueno y pican de esos tomates tan ricos aliñados con aceitito de oliva virgen. El miedo de los unos es igual al de los otros y de él se valen para que todo siga igual…

Ranging, de Kygo y Kodaline.

viernes, 16 de septiembre de 2016

Ganas de ser mejores...

Se suponía que antes este mes era importante, septiembre era tu mes, pero ya no. Bueno, sigue siendo tu mes, pero yo ya no estoy, así que todo ha dejado de ser. Antes todo era diferente. Parecía que el sol brillaba más, que aunque hubiese contratiempos siempre había una ilusión en la que fijarnos para que la luna nos iluminase. Había risas, ganas de ser mejores...

Pioneer, de Freddie.

martes, 13 de septiembre de 2016

Un poco más

¿Qué ha pasado hoy? ¿Quién sabe? Ya perdí la cuenta de los segundos, se me amontonan y me cuesta recordarlos todos. Solo aspiro a que esto continúe un poco más. El sol sale por las mañanas, la gente chilla en las calles y la lluvia sigue de vacaciones. No sucede nada, mientras la vida pasa. Y detenido en el tiempo aguardo a que una oportunidad, cual bálsamo milagroso, me devuelva a la vida.

Pdt. Buen martes trece a todos.

domingo, 11 de septiembre de 2016

De todo...



Hay canciones alegres y otras tristes. Hay músicas que te hacen vibrar y otras que te hielan. Hay de todo...

Pioneer, de Freddie
J'ai cherché, de Amir Haddad
Sin puntos ni comas, de Pedro Guerra
If I were sorry, de Frans
La vida, de Mano Negra
Las ganas, de Dani Martín
Can't stop the feeling, de Justin Timberlake
Dibujas, de Dani Martín
Golden and green, de The Builders and the Butchers
Hada chalada, de Bunbury
Simply the best, de Tina Turner
Disparo al aire, de Fredi Leis
Mujeres liberadas, de Melina León
Easy, de Hinds
Not in love, de Maika Makovski

viernes, 9 de septiembre de 2016

Chica para todo

Cada día se levantaba a las cinco de la mañana para ir al trabajo. Debía despertarse muy temprano, prepararse rápido y, a veces, pensaba que el agua fría de su ducha y las ganas de comer a final de mes no compensaban tanto esfuerzo, pero aún así seguía yendo. Trabajaba en un edificio muy importante, a las afueras de la ciudad; para llegar era fácil, a esas horas no había nadie en las calles. Una vez allí, debía sonreír constantemente, aparentar que era feliz en medio de aquella jauría. Era la chica para todo, la única que conseguía que aquello anduviese. Sin embargo, el mérito era para ellos, para los hombres, que alardeaban de su tradición humanista cristiana, de sus convicciones neoconservadoras y, sobre todo, de sus sospechas hacia todo lo que fuera diferente. Ellos eran hombres y ella, solo la chica para todo...

Two, de Antlers

Pdt. Poco a poco, parece que todo vuelve a la normalidad...

martes, 6 de septiembre de 2016

Sin batería


Y otra vez a vueltas con el tiempo, con su paso atolondrado. A veces me empeño en que su paso se acelere y otras, que se detenga irremediablemente. Nunca llueve a gusto de todos y menos en tiempos de sequía. Los aviones que vuelan disipan las nubes de tormenta y también todas las dudas. Al final solo quedan los relojes que nunca se detienen, aunque ya no tengan batería. A mí tampoco me queda demasiada. Tal vez por eso siempre quiero que todo suceda ya, cuanto antes. Se me agota el tiempo y no tengo más.

Girls and boys, de Blur.