miércoles, 24 de diciembre de 2008

Las esquinas en el sendero

Hoy he vuelto a decir tu nombre. Hace un rato he vuelto a escarbar entre mis escombros. Lo he removido todo. He dicho por fin cómo te llamas. He pedido por favor que no desvelen tu nombre, pero necesitaba decirlo en voz alta. Tengo que sacarlo de mí. Quiero certificar cuánto sufro. Confesé que eres a quién más he querido y al único que he amado. Que eres un ser excepcional, a pesar de lo que muchos puedan pensar de ti. Pero quiero que esto acabe cuanto antes, quiero aprender cómo se hace para desenamorarme de ti, porque ya no sé qué más hacer... Hay momentos en los que el vacío lo inunda todo. Otros en los que lo hace la pena. Lo he intentado de mil formas distintas y sé que estoy en el buen camino, pero hay esquinas en el sendero que se atraviesan. He vuelto a nombrarte porque las cosas son como son y no de otra manera. Porque me hago ideas vanas sobre tu vida, ahora que yo no estoy y no quiero hacerme más daño. Deseo que el mal tiempo amaine, que regrese el sol, pero que lo haga para quedarse. Hoy he dicho tu nombre...

http://es.youtube.com/watch?v=FguDLguubCM

Pdt. La noche ha sido distinta. Ha tenido cervezas, momentos tensos, cartones de bingo y confesiones en un antro de rockeros... La canción es una de las deudas pendientes que tengo. Esta entrada prenavideña no iba a ser así, pero tal vez las cosas se pongan en su sitio de una vez por todas... Gracias por estar ahí.

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