lunes, 9 de junio de 2008

La despedida (II)

Se acabó. Por el momento. Un besito, pisquis. Y una sonrisa. Única. Mañana se va a Marruecos. Y el resto se queda aquí. Mi despedida fue extraña. Como si no fuera. Como si no fuera a suceder de verdad. No termino de creérmelo. Rabat me queda tan lejos... Esta vez no pisé el barrio de San Cristóbal, ni comí un bocadillo de calamares escuchando el run run de las olas. Fue raro. Me quedo con Las Palmas a toda prisa, detrás del cristal de la guagua. Y con la música de la discoteca. Con los que miran y los que son mirados. En mitad del mar. Al final, la Kika durmió a mis pies en una cama para tres. Nos acostamos pasadas las cinco. Fue una gran noche. No cabe duda. El broche de oro, una canción de las LadysFX tarareada por ella. Vamos al noa, noa, noa, noa, vamos al noa noa, vamos a bailar, éste es un lugar de ambiente donde todo es diferente, donde siempre alegremente bailarás toda la noche... Ahora sólo queda el presente.

http://es.youtube.com/watch?v=FCFaWZO26Dg

3 comentarios:

La Gallega dijo...

Lo reconozco. Me has hecho llorar, me has emocionado. El periódicos siempre dice que soy una llorona y tiene razón. Dura por fuera, blandengue por dentro... Me acuerdo de mucho de vosotros, de todos, a los que veía todos los días y a los que me costaba más verles el hocico. Al fin y al cabo antes sabía que os tenía cerca, a unos minutos o unas horas, pero cerca. En la misma isla o en la de en frente, pero sobre todo, en el mismo país. Desde aquí me siento tan lejos de todos... Sé que la despedida fue extraña, pero todas mis despedidas son así. Odio los au-revoires, me parecen tan tan tan tristes. Yo no quiero despedidas, quiero pensar que siempre tendré a mi gente a mi lado, que no me hace falta despedirme de ella. Estos primeros días en Marruecos han sido duros, de adaptación, y lo que me queda por delante no lo va a ser menos. Tengo mucho miedo a muchas cosas. A que algo falle y no salga bien. A fracasar. A no encontrar gente como vosotros, a la que querer y que me quiera. Y a muchas cosas más. Pero ya me he prometido quitarme de encima esos miedos que no me dejan avanzar libremente y ser yo (léase, lo contrario a la cordura). Cuando se me pasan los ataques de nostalgia y de pánico me doy cuenta de que aquí también puedo ser muy feliz, que tengo mil cosas que aprender y que he conseguido lo que quería, por fin. Sé que pronto vamos a volver a vernos. En septiembre quiero volver a Las Palmas y para los carnavales no pienso renunciar a disfrazarme de pirata más que sea por unas horas. Te quiero mucho. Cuídate y no te olvides de la galleguiña. Y ya sabes: Vamos al Noa... Julio Bonis for president!!! jejejeje.

La Gallega dijo...

La verdad es que aquí tengo una buena anfitriona. Una amiga de las de verdad, no sé si alguna vez la llegaste a conocer. Se está portando conmigo muy bien. Menos mal que la tengo a ella... y a la Kika, claro...jejeje

Ce Castro dijo...

TQM galleguiña. Tienes razón siempre estaremos juntos. Küidsé muxo.