Antes. Una canción. Si amanece, de Rocío Jurado. Anoche volví a pensar en tus ojos y en tus orejas. Los días pasan y tú sigues estando aquí, dentro de mí, aunque no lo estés. Me imagino acariciándote esa barriga tan divertida tuya. Sé que tu mundo ahora está dando demasiadas vueltas y que, tal vez igual que yo, sólo estés deseando bajarte en la próxima.
Los últimos meses han sido extraños y quizá los que vengan lo sean más. Quién sabe. Tu vida ha cambiado y ya no será tan fácil poner excusas para encontrarte en esa esquina que también quiero abandonar porque ya tú no estarás. Todo dependerá de ti, ahora. Las cosas son así, de este modo tan raro, y yo lucho pero a veces siento que ya no tengo fuerzas para seguir feliz.
http://www.youtube.com/watch?v=p2kMCCPEFxI
Ahora. Ha vuelto a aparecer ese perro vagabundo en el que a veces me convierto. Sin rumbo fijo y sin dueño. Sin un lugar en el que dormir. Buscando un cacho de pan duro por esas malditas calles que ya no te ven pasear. Y también una caricia. El cachorrillo no está ni alegre, ni triste, ni na. Está, como lo están los cubos de la basura, los móviles sin batería o las canciones que ya nadie tararea. Sus ojos vuelven a estar tristes, pero anhelan tu piel. Siguen vivos y eso, en estos momentos, es importante para mí.
2 comentarios:
Mu bien todo lo que dices pero, por favor, lo de Rocío Jurado me ha matado... no puedo creer que te guste como para poner un enlace en este blog. Ce, por favor, reacciona. Esta historia te está lobotomizando....
Ves, un símple comentario... y qué fácil es alegrarme el día. Muchas gracias.
Publicar un comentario